lunes, 8 de noviembre de 2010

Siempre nos quedará... Mangiafuoco.


"He llamado a Daniele. Tiene trufa blanca. Reservado viernes 22:00". Un escueto SMS de mi amigo Nacho es el comienzo del peregrinaje anual a un lugar santo.

Nos recibe en la puerta con una media sonrisa cansada y un apretón de manos. "¿Come va Daniele?"
"Va bene"-  nos contesta sin creérselo demasiado.
Daniele llegó a Mallorca hace ahora quince años (todos pensamos que estaba aquí desde el principio, hace mucho más) desde su Toscana natal. "De la parte cara. De la costa. Tú sabes, Briatore, Valentino, Berlusconni, ...". Es italiano y no lo esconde. La falta de complejos de la que hacen gala casi todos los hijos de la antigua Roma se respira solo al entrar en su templo. En el local de una antigua panadería de la Plaza del Vapor, en "Es Jonquet" de Palma de Mallorca abrió su "Mangiafuoco", un restaurante de final de siglo; del XX por supuesto. Sus manteles a cuadros, sus fotos del Papa, de los reyes de España, sus camisetas de fútbol colgadas en las paredes, sus imágenes toscanas son un claro ejemplo de lo que deberíamos haber aprendido nosotros, los españoles, después de 30 años de bonanza económica. Daniele tiene SUS cosas claras: Vaticano y fútbol, los pilares básicos de cualquier italiano que se precie; y él los exhibe sin pudor, orgulloso de ello; nosotros lo vemos normal, incluso agradable, me pregunto si pasaría lo mismo a la española. Si nos sacan del eterno minimalismo actual (rural o urbano) nos veríamos desubicados, faltos de calor o desconfiados. ¿Cuántos irían a comer (bien) a un restaurante decorado con las fotos de Casillas besando a la Carbonero y una camiseta firmada por Puyol? No sé, ni me importa. No seré yo el que defienda a los italianos en nada, pero su falta total de complejos y su sabiduría gastronómica siempre me han dado mucha envidia (y no de la sana precisamente).
De primero Bruschetas y Vitello Tonnato: bien como siempre. De segundo trufa blanca. Yo con huevos fritos, el resto con pasta. Se acerca Daniele con su tesoro y su mandolina, y comienza a laminar el deseo. En su justa medida, con las cosas importantes no se juega. Debido a mi impertérrita e incansable alergia no puedo disfrutar completamente del aroma, el paladar mal ventilado es un órgano inútil. Da igual, lo recuerdo de otras ocasiones y ya está. Los otros dos afortunados asienten sin hablar y queda todo dicho. El vino de la casa, italiano por supuesto, es equilibrado y suave, perfecto para pasta.
Seguimos con Tiramisús y Pannacottas. Coronamos con cafés y Gin-Tonics.
El ritual se completa cuando se incorpora a la tertulia Daniele. Anda últimamente un tanto derrotado, cansado y triste. Su local de detrás del Corte Inglés de Jaime III le da más problemas que alegrías. Su idea de traer algo de la Toscana urbana a Mallorca no ha acabado de funcionar. "Aquí no damos tanta importancia a la comida"- intento consolarle inútilmente. "Si puedo lo traspaso antes de navidad; que hace dos años que no me puedo ir de vacaciones". Esa es la envidia de la que hablaba antes: las vacaciones. Lo importante debe serlo siempre e ir por delante de cualquier cosa. El cultivo de la gastronomía, las relaciones sociales, la familia, de la vida en general es algo muy difícil de aprender, pero una vez que se conoce ya no se olvida ni se puede actuar de manera diferente en el día a día. Las vacaciones ante todo, la vida por detrás de nada.
La cuenta fue un escueto ticket con una cifra de tres números. Un lacónico cien dictado por el apóstol nos dio una bendición de treintaycinco por persona y el anhelo de volver lo antes posible. Salimos cabizbajos, sin consuelo por el final del trayecto. Los mojitos del "Havana" y del "Cuba" deberán esforzarse. Pero eso ya es otra historia...

P.D.  Debido a algunos comentarios en esta entrada debo aclarar: MANGIAFUOCO NO CIERRA. El local que Daniele quiere traspasar es el otro que tiene detrás del Corte Inglés de Jaime III; una cafetería que hacen platos del día de estilo italiano y que, cuando aquella zona presumía de oficinas y hombres (y mujeres) de negocios, estaba concurrida. Ahora, después de la fiesta y después que huyeran un par de auditoras americanas y alguna empresa hotelera mallorquina aquello ha quedado como un solar. "En ese parking (se refería Daniele al que hay entre "La Oca" y su local) antes había lista de espera, ahora están todos vacíos". No llamemos al mal tiempo. Nos queda "Mangiafuoco" por muchos años.

















Rest. MANGIAFUOCO.
Plaza Vapor, 4.
Es Jonquet.
Palma de Mallorca.
Tel: 971 45 10 72.



6 comentarios:

  1. Lástima de restaurantes que tienen que cerrar sus puertas, es impresionante el daño que nos está haciendo la crisis en nuestra isla.
    No tengo el placer de conocer su restaurante pero posiblemnte vaya en poco tiempo, un abrazo y mil gracias por mantenerme informada de lo que ocurre...aquí mismo...

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  2. Pues yo si he ido a comer a este restaurante, un día de "antojo" de comida italiana, y me gustó muchísimo, la comida es muy buena y el trato me encantó.
    Que triste el final de la historia, es verdad que nos quejamos tanto de la comida basura y que comemos mal y cuando tenemos buenos restaurantes...que? eh?...Lo siento. Saludos.

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  3. Señoritas, no lloren, quizás me malinterpretaron, quizás me expresé mal: Daniele quiere traspasar su local de detrás del Corte inglés de Jaime III. Una cafetería que hacen platos del día de estilo italiano y que, cuando aquella zona presumía de oficinas y hombres (y mujeres) de negocios, estaba concurrida. Ahora, después de la fiesta y después que huyeran un par de auditoras americanas y alguna empresa hotelera mallorquina aquello ha quedado como un solar. "En ese parking (se refería Daniele al que hay entre "La Oca" y su local) antes había lista de espera, ahora están todos vacíos".
    Pues eso: MANGIAFUOCO NO CIERRA. No llamemos a la mala suerte. Si se lo habéis comentado a alguien, por favor, remendarlo cuanto antes.
    Un saludo y mil gracias. ¡Mira que sois rápidas!

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  4. Lo conozco de una media docena de veces. Me encanta. Pasta con trufa (de la autentica). No escatima la trufa como en otros restaurantes que solo la enseñan. Ademas es un tipo genial. espero que no cierre

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  5. Tomo nota para la próxima vez que vaya a Palma, me encanta saber de restaurantes con una recomendacion tan especial!! besosss

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  6. Vaya, que ya lo he enmendado...eso de leer entre lineas no va bien la gran mayoria de veces, mea cualpa, un abrazo paisano.

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